El proyecto

Pretende ser un ejemplo por la combinación de elementos innovadores e integradores en materia de educación para el desarrollo, cooperación y emprendimiento social.




MISIÓN, VISIÓN Y VALORES

MISIÓN
Empoderar a líderes sociales, que mediante iniciativas propias promuevan el cambio y mejoren el desarrollo tanto propio y local como el de otras comunidades de países menos desarrollados a través de la cooperación y del emprendimiento social.

VISIÓN
El proyecto es un ejemplo a seguir por la combinación de elementos innovadores e integrales en materias de educación para el desarrollo, cooperación para el desarrollo y emprendimiento social, así como el cambio de cultura y valores que eso conlleva.

VALORES
Participación, cooperación, esfuerzo, equidad, emprendimiento social, compromiso con el cambio, transparencia.


SOBRE LA INICIATIVA

“Young Social Leaders” tiene como objetivo promover la cultura de cooperación internacional y el emprendimiento social en jóvenes, especialmente aquéllos con alto índice de fracaso escolar, con el fin de desarrollarse personal y profesionalmente, así como de mejorar la calidad de vida y el desarrollo de las comunidades de países en vías de desarrollo. Se trata de impulsar líderes sociales, que sean motores del cambio social, a nivel no sólo local, sino también global.

El proyecto tiene varias fases:
  • Sensibilización y educación para el desarrollo.
  • Formación para el emprendimiento y desarrollo de iniciativas sociales.
  • Cooperación para el desarrollo y mejora de la calidad de vida de niños y jóvenes de otros países menos favorecidos.

Parte de dos necesidades: por un lado, el desarrollo de valores y la motivación de jóvenes de aquí, haciéndoles conscientes de los problemas globales e inculcándoles la cultura del esfuerzo para promover el cambio y combatir las desigualdades y la vulneración de los derechos humanos. Además, existe un problema de desempleo juvenil y de alumnos desmotivados con alto índice de fracaso escolar que no encuentran una motivación personal y mucho menos profesional.

Por otro lado, existe la necesidad de empoderar a los niños y jóvenes de los países menos favorecidos y de mejorar su calidad de vida. La brecha entre países desarrollados y menos favorecidos es cada vez mayor y las necesidades son múltiples.

Los protagonistas dejan de ser los financiadores o los técnicos y directivos de las asociaciones o fundaciones; se trata de formar líderes sociales, futuros emprendedores sociales que con sus iniciativas a pequeña escala beneficien a otras personas que viven en situaciones más precarias que las suyas (en muchos casos, la de sus propios países de origen). Trata de generar sinergias a larga distancia (el desarrollo de las nuevas tecnologías cada vez lo hace más fácil), de modo que los jóvenes de países lejanos también sean conscientes de los problemas que tienen otros jóvenes en otro punto del planeta y del esfuerzo que están haciendo para generar cambio en la vida de sus comunidades.


EL ORIGEN DEL PROYECTO

Creemos que el motor de cambio de nuestra sociedad son las personas, y por eso queremos contribuir con este proyecto a promover e impulsar jóvenes comprometidos que crean firmemente en su capacidad para hacerlo.

Hasta ahora, las asociaciones, fundaciones, etc., que trabajan tanto en el ámbito de la educación para el desarrollo como de la cooperación internacional, lo hacen de un modo bastante independiente. Pretendemos aunar fuerzas, vinculando directamente los resultados de la educación y formación para el desarrollo con el desarrollo de proyectos de cooperación internacional, de modo que se establezca una relación directa entre ambas áreas y entre los jóvenes de aquí y los de allí. Una idea sencilla, a priori, pero ambiciosa por su envergadura...


IMPACTO DEL PROYECTO

En este proyecto debemos hablar de dos comunidades diferentes: comunidad local (Rivas y/o alrededores - Madrid) y la comunidad local de uno de los países en vías de desarrollo donde se lleve a cabo un proyecto de cooperación.

Comunidad de Rivas y/o alrededores - Madrid
  • Jóvenes con alto riesgo de fracaso escolar habrán sido formados y capacitados como líderes sociales; se les ha inculcado una serie de valores sociales, cooperativos, etc., sintiéndose motivados para emprender y comprometidos con su comunidad local y con el resto del mundo.
  • Los líderes sociales son referentes para otros jóvenes; son ejemplos a seguir por compañeros en similares circunstancias, reduciendo así el fracaso escolar.
  • La calidad de vida de los jóvenes y sus familias ha mejorado, no sólo la situación económica, sino también se les ha dotado de capacidades y habilitadas para saber actuar activamente ante los cambios y encontrar una sostenibilidad económica en el futuro.
  • Mejorado el ambiente de la comunidad escolar, la cooperación entre compañeros y profesores y alumnos, etc.

 Comunidad local de otro país
  • Niños y jóvenes tienen mejor acceso a la educación y a un sistema educativo de calidad. 
  • Mejoradas de las condiciones de salubridad, higiene y alimentación de la comunidad. 
  • Jóvenes conscientes de los problemas globales que repercuten en su deficiente situación y que se sienten motivados por el esfuerzo que hacen otros jóvenes de otros países lejanos para promover el cambio 
  • Inculcados valores cooperativos (se acaba la cultura de beneficiencia y caridad aún existente en muchos proyectos, entidades y comunidades)

Comunidad global
  • Aumento de la cooperación y de las alianzas mundiales para solucionar problemas locales que no dejan de ser globales; a través del uso de las TIC’s, contacto directo, visitas a terreno, etc. 


SOSTENIBILIDAD

Económica

Los jóvenes líderes desarrollarán iniciativas sociales que beneficien económicamente tanto a su entorno como a otras comunidades de países en desarrollo. Al ser empresas/iniciativas sociales, los beneficios se utilizarán para seguir desarrollando y ampliando el proyecto. También potenciarán sus capacidades para saber actuar ante los cambios y encontrar una sostenibilidad económica futura.

Simples ejemplos de iniciativas que generen ingresos pueden ser la gestión de la cafetería del instituto, venta de materiales de segunda mano, etc.

El sistema de microcréditos, incluso entre compañeros, es una herramienta que se considerará a la hora de financiar diferentes iniciativas.

Los proyectos de cooperación apoyados deberán ser sostenibles en el tiempo, de modo que se capacitará a los beneficiarios con el fin de que en el futuro ellos asuman la gestión y mantenimiento de los recursos, medios, etc. que se generen y/o deriven del proyecto.


Social y cultural

Como decía, los jóvenes serán ejemplos a seguir por otros compañeros; son ellos los elementos activos del cambio social.

Valores y elementos culturales como el emprendimiento, cooperación, desarrollo personal, compromiso con el cambio, esfuerzo, etc. se arraigarán en la sociedad; esto les hará más conscientes de los problemas globales y su relación, impulsándoles a actuar para cambiar la situación.

El cumplimiento de los objetivos y el análisis de los resultados obtenidos serán un motor social que estimule para seguir trabajando.


Medioambiental

Las iniciativas empresariales y sociales que se desarrollen con el proyecto tendrán siempre en consideración la protección, conservación y mejora del medio ambiente.

Este ámbito es un punto importante a tener en cuenta, por tratarse de iniciativas que pretenden incrementar el bienestar social.

Lo mismo sucede con los proyectos de cooperación apoyados desde aquí; se tratará de proyectos que promuevan la sostenibilidad medioambiental.








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